La hidra 2


Por Enrique Vélez Piedrahita

En reciente artículo que titulé “La hidra” y que publicó confabulación, manifesté que el poder del uribismo no se lo podría sacudir Santos así no más, como muchos sostenían por el hecho de haber designado un excelente gabinete, con algunas excepciones y, por haber “recompuesto”, en sus primeros días de gobierno las relaciones diplomáticas con Venezuela. Advertí que una vez finalizara el empalme, el nuevo Presidente se daría cuenta del poco campo de acción que le había dejado su antecesor, con todo el entramado de nombramientos hechos a última hora y de compromisos ya consolidados entre contratistas y congresistas en el carrusel de la contratación  administrativa, a más del poco campo que tendría en la conformación de la nómina diplomática ya comprometida hasta los tuétanos con el uribismo.
Pues bien, lástima que se estén  cumpliendo algunos hechos que corroboran lo que vaticiné. Baste ver cómo sin el menor asomo de vergüenza  tuvo el Presidente Santos que  proceder a nombrar embajador en Italía al títere de Uribe bien llamado Uribito, personaje hoy sub-judice de ingrata recordación para los colombianos por sus “pilatunas” en el programa de Agro Ingreso Seguro y quien,  de no haber sido por el  quimérico empeño de Nohemi  en volver a aspirar, se nos habría podido enquistar como Presidente en cuerpo ajeno. Esperemos que el Gobierno Italiano se oponga a esa designación, pues no veo cómo no cuestione al gobierno de Colombia por intentar hacerle un  trueque tan nefando, es decir, embajador condenado  por embajador empapelado. 
La Hidra uribista como hasta ahora se empieza a ver, está ahí, atenazándolo todo y no está dispuesta, ni más faltaba, a dejarse arrebatar un ápice de poder y de clientela; por el contrario sigue trabajando de manera casi imperceptible, baste con ver, cómo logró que el Fiscal encargado Mendoza Diago sacara por la puerta de atrás a la Doctora Ángela María Buitrago Fiscal Delegada ante la Corte Suprema de Justicia, bien apodada la Fiscal de Hierro por su incuestionable valentía y probidad en la conducción de las más sonadas y peligrosas investigaciones recientes como la que se le sigue al hermano del ex ministro del Interior y de Justicia Guillermo Valencia Cossio, Exdirector de Fiscalía de Medellin, comprometido al parecer con mafiosos de Antioquia, la del Palacio de Justicia contra el Coronel retirado Alfonso Plazas Vega quien fue condenado por desaparición forzada de algunas personas que salieron con vida del Palacio, la del Ex senador Ciro Ramírez, al parecer  también comprometido con miembros de la mafia. Investigaciones todas que en Colombia entrañan un desmesurado peligro para quien las conduce y que exigen inteligencia, osadía y coraje, como también lo tuvo al citar a audiencia para imputación de cargos por calumnia a Pachito Santos y al inefable José Obdulio Gaviria, dos de los principales alfiles del tinglado Uribista.
La pregunta en consecuencia es: ¿ Porqué de un momento a otro, el Fiscal General procede a aceptarle la renuncia previamente solicitada por él a  la Doctora Buitrago?,  ¿ acaso se convirtió en pieza incómoda para alguien ?. Si el sustento de la decisión de aceptarle la renuncia fue la mora en el trámite de otros expedientes, ¿ porqué no la había retirado antes ?, al fin de cuentas él ya lleva trece meses como Fiscal General,  ¿ Que es más importante para la Fiscalía, una  Fiscal integra  capaz de tomar decisiones trascendentes por incómodas que le resulten al que sea o, una Fiscal que se arredre ante una situación que la pueda poner en peligro o que se deje intimidar por alguna de las partes o por terceros que puedan resultar involucrados penalmente en el hecho investigado ?.  No creo en la razón esgrimida por el Dr. Mendoza quien de paso con ese argumento motivó la aceptación de la renuncia para poder justificarse ante la opinión. En mi criterio, lamentablemente no sé cómo, fuerzas oscuras al fin lograron convencerlo de proceder como lo hizo y espero y creo que lo hizo de buena fe. La Hidra seguirá haciendo su trabajo, no lo duden.